Sin escafandra 1 (Abierto por obras).

El trabajo de buzo es esclavo pero permite alguna escapada en momentos de marea baja. He abandonado por unos días el puerto.
Adentrarse en la Catedral de Santa María de Vitoria-Gasteiz supone el inicio de un apasionante recorrido por el pasado y la historia construida de un casco medieval de gran belleza. Un paseo histórico en el que puedes participar de una oportunidad única: contemplar en directo los trabajos arqueológicos y de restauración de un templo gótico del siglo XIII, complejo en su estructura y rico en testimonios del pasado.
La Catedral de Santa María es hoy ya un espacio temático en materia de Historia, Arquitectura, Arqueología, Cultura y Arte, con el atractivo de que los contenidos cambian conforme avanzan las investigaciones, el buzo ya la visitó en 2004.
El eslogan “Abierto por obras” resume la filosofía del proyecto. Se pueden seguir a través de una gran plataforma las obras de rehabilitación de un templo debilitado por seculares problemas de sustentación y deformación. Para el desarrollo del proyecto se ha previsto un plazo aproximado de catorce años (2000-2014). El proyecto ha recibido el Premio Europa Nostra (2002), el máximo galardón europeo en recuperación y conservación del Patrimonio Cultural.
“Las restauraciones de catedrales en Europa deberían seguir el ejemplo de la catedral de Santa María. En ningún lugar del mundo se puede ver algo así”. Este elogio procede del escritor Ken Follet.
El novelista presentará la edición española de su nuevo libro 'Un mundo
sin fin', segunda parte de 'Los Pilares de la tierra', en enero de 2008 en Vitoria.
Tras utilizar en su nueva novela los conocimientos adquiridos en sus visitas al templo gótico de Vitoria.

Para comer de menú: "El 7" (c/ Cuchillería, 3). Gracias Idoia.
Una recomendación de Mónica:
Otra forma original de conocer una catedral es el caso de Salamanca.
Ieronimus es una valiosa y sorprendente exposición documental sobre los "900 años de historia de las catedrales" y su historia constructiva.
Hasta hace poco tiempo las torres medievales de la Catedral se encontraban tapiadas; hoy están abiertas y ofrecen espacios desconocidos para salmantinos y visitantes, tanto de la catedral vieja, como de la nueva y de la ciudad.