Lo que dio de sí el verano (y IV).
A estas alturas del año y con la nieve en los talones, hablar de verano suena muy lejano, pero no podía acabar la serie “lo que dio de sí el verano” sin hablar del proyecto al que mas tiempo he dedicado.
Lo comencé en agosto pero lo he terminado hace unas semanas.
Es un proyecto editorial con Méjico.
Cuando todavía éramos estudiantes, se decía que para trabajar, los músicos tenían que irse a vivir a Madrid y los ilustradores a Barcelona. El tiempo y sobre todo las nuevas tecnologías, han hecho posible que uno pueda vivir donde quiera, sólo es necesario una cuenta de correo y la posibilidad de poder enviar archivos con alta resolución (FTP por ejemplo).
Los músicos todavía se van a Madrid.
Ha sido curiosa la experiencia, pese a la diferencia horaria, ha existido buena comunicación, casi diaria.
Quería agradecer a Elisa Castellanos de CIDCLI (la editorial) como ha llevado durante estos meses la gestación del cuento y la buena predisposición de Alonso Núñez, autor del texto. Ha sido muy enriquecedor colaborar en este proyecto.
El cuento habla sobre la escasez de agua (dulce) un problema global y cómo se puede concienciar a los niños de su buen uso. Iré contando como va la edición.
De momento, como muestra, una ilustración y su proceso.
2 comentarios:
¡Qué linda!
Bonito proceso.
Que vaya bonito el cuento, ya nos informarás de su andadura.
Me alegro que finalmente el proceso haya salido bien. ¿Cuando estara disponible? Yo quiero uno!! :D
Ya lo sabes.. ;)
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